-¿Cómo definís amor?
-¿Cómo te gustaría que lo defina?
-Con la misma honestidad que sobrepasa tu límite de hechicera.
-La vida no es sólo magia
-No, la realidad ocupa gran parte del tiempo y no me gusta, desnuda lo peor de la gente.
-Muestra la verdad que no se puede alterar.
-Alteraste mi vida con tu magia y ya no puedo cambiarlo.
-No fue magia
-¿Qué fue?
-Amor.
¿Entonces así lo definís? ¿Sólo eso es? ¿Sufrir? ¿Invocaste a las estrellas más aisladas y las sobornaste a esto?
-Simplemente es tu imaginación. Siempre lo fue. Soy el reflejo de tus deseos.
-No, no te vayas. En los momentos en que más te necesito huís. Usas tu dulce veneno y tu místico andar y desapareces. Por favor no uses tu repetido ritual.
-Quiero dejar tu mente. Tus fantasías no necesitan más de mi presencia.
-Ya siento las heladas huellas de tu abandono rodando por mis mejillas y la soledad mirando desde un rincón, satisfecha con tu actuación. Estos últimos momentos me pesan.
-Yo soy tu carga. Me trajiste a tu prisión esperando que te sane, pero sólo empeoré tu tristeza. Te recuerdo a ella, me creaste igual.
-Y como ella también me dejas
-No, yo nunca estuve acá...