Quiero que sepas que ya estabas en mi piel, que tus besos ya habían estado en mi boca, y que nunca necesite conocerte para decirte tantas cosas.

Antes de encender la luz camine de tu brazo por la callejuela empedrada de luminosidad zafiro, ya antes de estar contigo tus besos sabia su sabor y su textura refregada de ciruela.

No necesitabas tocarme para tenerme en ti por que ya antes me habías tocado con tu sonrisa y la mirada de niño que no se separa ni un momento de tus ojos.

Antes de encender la luz bésame acalambrado y furioso, por compartirme lejos de tu ser y tocándome entre las letras que ya conoces y habían despertado en mi una sensualidad hasta hoy desconocida.


Antes de que enciendas la luz mírame como nunca miraste a nadie mas, promete una segunda vez, confecciona para mi la mentira perfecta que me lleve a tus brazos una y otra y de mas veces enséñame a ver las estrellas con tus ojos maduros y cansados por la experiencia de la cual carezco.



Antes de encender la luz, comunícame entre tus manos, tus secretos salados, enséñame a perder el pudor, confecciona con tus dedos mi piel desnuda que hoy estas estrenado, cobíjame en un recuerdo inolvidable de una noche.


Enséñame a decir amor en tu nombre, provócame y convénceme a perder la cabeza en tus besos, descubire tu estructura ósea, dame la confianza de enseñarte lo que guardo bajo la ropa, desnuda este corazón acalambrado de deseo, impetuoso y apasionado, que necesita gritarte, lo que en tus palabras la hace sentir llévame a otro lado en mi cabeza, construye para mi el paraíso que solo comparto contigo.


No me mires, con deseo, mírame como si nunca hubieras tenido que ver conmigo, experimenta por primera vez un secreto que guardo bajo la cama, cama vacía, donde cabe tu cuerpo, pálido y dorado por las convicciones de tu sangre, que mas quieres de mi, que sin sentir tu corazón, me has tenido impregnada en la sangre.


Conquista, un segundo del tiempo explícame, como aman tus detalles y la sensación que mis labios dejaron en los tuyos, provócame curiosidad para querer explórate de vez en vez, déjame grabado el olor de tu piel, y si algún día te vuelvo haber, confecciona para mi, un secreto que solo al mirarnos a los ojos sabremos si es verdad o un segundo de pasión.

Pero que esto sea antes de encender la luz.