... Aquella gran ansiedad de las lagrimas por trazar su llanto en letras, que un gran poeta entierra en el cementerio de las grandes clemencias; palabras escritas en una pequeña esmeralda, salidas de un corazon que cada dia la rutina quebranta.
Hermanos poetas no lamenten este don que es el alma de la sabiduria,
mas bien les digo, deja ya de hacer tantas habladurias bien es cirto que necesitamos una bella musa en un mar de lagrimas, pero como conseguirla? si nuestro velero esta lleno de aguas manchadas.
No existe humilde vientre en tal vanidosa fortuna, ya que el mal fue progenitor de aquella noche inoportuna, puede que aveces el mal se contradiga, pero bien es cierto que fue enjendrado en cuna de venenosas espinas.
Dichoso tu, hermano, mi consuelo es tu escudo, abre los ojos cada mañana y enfrenta piadoso a aquel inmenso mundo; tu gran porvenir, hermano, no lo conviertas en tu duro sufrir, sientete dichoso de tener algo con lo que decir y sentir, pues bien es cierto que muchos cambian todo esto por un oscuro porvenir.
En el viejo velero siempre existira el brillo de un deseo, que sera cubierto y protegido por aquellas constelaciones de gran destello; el velero siempre lleva por compañero, a aquel veterano heredero...
no trates de ser como aquel que...
no ha regalado ni uno, pero ha perdido ciento... |