te escribo, para saberte mía,
para que a pesar de la enorme distancia
que nos separa no quede un milímetro
entre tus pechos y mis días,
para que cada átomo de tu fragancia
quede impregnada con la mía,
te escribo para no perderme en la locura
y fría noche de mi vida.
hoy desperté llorando por la hermosa vida,
hoy sigo bailando
y recordando a cada rato tu singular sonrisa
tu cabellera radiante y
tus besos de savia viva...
hoy estoy feliz,
hoy estoy vivo
y vives en mí...
amor mío.
Texto agregado el 28-11-2005, y leído por 147
visitantes. (1 voto)
Lectores Opinan
17-05-2006
Maldita distancia que nos hiere tanto, y bendito amor que nos hace soportarla. Me encanta!! Tleyotl