Y quisiera ser un pájaro
Y volar hasta Dios
Abrigarme con sus nubes
ser lluvia en su misterio
Y manos en su plegaria…
Vuelo…
Mis pies permanecen en la tierra
y el silencio comulga la quimera.
Y quisiera ser un pájaro
Volar, ser libre… escapar…
¿Pero escapar de qué?
¿De quién?
¿Del desarraigo?
¿De mi desierto?
De nada sirve escapar…
Huir sólo alimenta la soledad,
vendan mis ojos
y ahogan los sentimientos…
No logro discernir qué es,
pero hiere mi alma no dejándola respirar.
¿Miedo? Puede ser
Pero no será el temor
quien inicie la cuenta regresiva.
Y a pesar de esta certidumbre
el camino es incierto para mí.
Intento compatibilizar con la felicidad
Pero me encapsula la rutina
y olvido quien soy y que existe alguien
que más allá de la realidad, me quiere…
Y mi vida es un por qué
excitando la razón y mí lujuria.
¿Por qué no he de volar
si he abierto mis alas a la igualdad?
He tenido todo a mí alrededor:
La vida, la lucha, la paz…
Es cierto que tengo ganas, voluntad
constancia y tiempo para los demás
pero no hay un nido cerca
Ni vació, abandonado,
Ni siquiera tibio para mí.
¿Dónde está mi vida?
¿Dónde el error que no pude evitar?
Amigo lector, no digas nada
Tu silencio habla
Olvidé amar y no aprendí a volar.