OTRA NOCHE MÁS.
Después de mil vueltas en la cama
de luchar otra vez con mis fantasmas
de quedar vencido, viciado y vacío,
me vuelco a ti con la esperanza vana
de no caer de nuevo en el hastío.
Y te busco, a pesar de no ser mí respuesta
por que tu sonido amortigua mi conciencia
me adormece, me embrutece y me evita pensar,
y con tu resplandor inconstante,
tu barullo sin sentido, distante
me retrae de la congoja,
y el licor que mis labios moja,
me permite soportarte, soportar
el sopor que me provocas
y que me impide pensar…
Te odio, y sin embargo,
ante ti me arrastro,
bajo tu influjo me quebranto,
y ya no puedo más,
trato de evitarte, y aunque no me dices nada,
no te puedo dejar.
Cierro mis ojos con fuerza pero dentro aun estas
te desprecio, te aborrezco,
y deliberadamente a ti me atengo
para poder soñar…
Inevitablemente, pasa el día raudo,
la rutina, la necesidad,
salgo al mundo, adormilado
deseando que el día acabe ya,
pero pasa con su prisa lenta,
que me atormenta cada vez más,
ya no puedo esperar,
no puedo,
mi anhelo resurge con fuerza,
deseo ahora con vehemencia,
pasar en tu odiosa compañía
otra noche más…
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