-Hey porque llevas gafas oscuras?-

vamos a ver...
Todo comenzó después del examen de historia, como todos saben entre clase y clase todo el mundo se sienta en la mesa del frente, se fuman un cigarro, se toman un café o hablan de sus cosas, así que el examen termino y todos cumplimos con el ritual y nos sentamos en las mesas del frente. La conversación iba por buen rumbo, había suficientes cigarrillos y la maquina de café no había robado a nadie, de repente y por un motivo que aun desconozco sentí la necesidad de mirarme la panza, sin que nadie me viera me escurrí en la silla, levante la camisa con disimulo y hay fue que me di cuenta:
¡¡¡TENIA UN HUECO EN TODA LA MITAD DE LA PANZA ¡¡¡
un hueco redondo¡¡¡ JUSTO EN LA MITAD DE LA PANZA¡¡¡¡
Mi primera reacción fue de pánico pero aguante las ganas de gritar, un terror inmenso me invadió, pero hay que recordar que la conversación iba por buen rumbo, habían suficientes cigarrillos, y la maquina de café seguía sin robar a nadie, así que en un gesto de valor, recogí mis cosas me despedí amablemente y salí de hay sin molestar a nadie

Ya por el pasillo me comenzó a subir el terror por las venas, sentí escalofrió y ganas de vomitar, para cuando salí de la universidad todo se había vuelto surrealistas, tuve que caminar dando tumbos hasta la avenida y una vez allí tuve que esperar mil eternidades hasta que paso un taxi:

¡¡¡SEÑOR TAXISTA¡¡¡ RAPIDO- AL HOSPITAL- ME ESTOY MURIENDO-
¡¡¡TENGO EL ESTOMAGO PERFORADO¡¡¡¡

el taxista comprendió la gravedad de la situación, no perdió tiempo, saco el embrague piso el acelerador y en 5 segundos íbamos a 160, derrapamos en las curvas, cerramos por lo menos a 3 troques, nos saltamos semáforos en rojo, yo no hacia mas que tocarme la panza gritar y maldecir mi puta suerte, hubo un momento en que pasamos tan cerca de otro coche que el espejo retrovisor derecho del taxi salio a bolar por los aires, cuando por fin llegamos al hospital el taxista se bajo apresurado, yo salí corriendo entre en el hospital y fui asía la primera enfermera que vi:

¡¡¡SEÑORITA EMFERMERA¡¡¡POR FABOR
ALLUDEME- ME ESTOY MURIENDO
¡¡¡TENGO EL ESTOMAGO PERFORADO¡¡¡
La enfermera me metió en la habitación contigua y fue a llamar al medico...
Asiendo un esfuerzo sobre humano me calme y me senté a esperar en la camilla, después de dudarlo barias beses me levante la camisa y me volví a mirarme la panza:
Era oficial tenia un hueco ¡¡¡JUSTO EN LA MITAD DE LA PANZA¡¡¡
30 segundos después entro el medico, me dijo:
-dejame ver la herida-
es esta doctor¡¡¡ (levantándome la camisa)
-cual?-
Esta¡¡¡ (señalándole el hueco redondo con mi dedo)
-no la veo-
mire bien doctor, no ve que tengo un hueco redondo con un nudo en el fondo ¡¡¡JUSTO EN MEDIO DE LA PANZA¡¡¡
-vamos a ver chaval eso que tu me muestras es tu ombligo-
mi que? pregunte
-tu ombligo, todo el mundo tiene un hueco justo en medio de la panza se llama ombligo-
todo el mundo tiene un hueco en la mitad de la panza?
-si se llama ombligo... om bli go-
y eso que significa doctor? pregunte
-que eres humano-
HO NO ESO NO POR FAVOR, CUALQUIER COSA MENOS ESO
DIGAME QUE NO TENGO ESPERANSA
DIGAME QUE MORIRE DE UNA MANERA HORRIBLE
PERO POR LO QUE MAS QUIERA NO ME DIGA QUE SOY HUMANO
El medico se puso histérico, me agarro del brazo me llevo a empujones hasta la sala de espera y en medio de continuas referencias a mi madre contó a todos los presentes lo sucedido, sin reparar claro esta que entre los presentes se hallaba el taxista al que por supuesto no había pagado la carrera...

y así fue como me gane este ojo negro y por eso llevo gafas oscuras