CATARSIS


Aún estoy esperándote. La pantalla enmudeció, y esa luz me podría encandilar si no estuviera ciego. Entonces da lo mismo. La soledad es más sola con los ojos sellados. ¿Qué tan fuerte es tu amor?...........¿volverás?...........volverás...

El ronroneo intenso de fin de transmisión, ya parece acunarme en estas horas lentas de la espera. El silencio sonoro que rodea este espacio, me ha llevado muy lejos. No de tiempo, pero si de distancia, de sonidos, de aromas, de sonrisas que en este extraño momento parecen esconderse.
Pero la soledad en un ambiente raro, como éste en el que habito mi monótona espera.

Demora tu llegada, no llegues todavía mientras voy caminando mi catarsis privada. Déjame resolverme en este instante lleno de desnudas verdades. ¿Y el trago...para qué?...ya no lo necesito mas que como un adorno de mi escenografía.
Deja sentir tu ausencia que te haga más fuerte a cada minuto que avanzo lejano a tu llegada. Crece hasta el infinito para que yo te extrañe.

Me llueve poco a poco la luz, que nebulosa trata de convertirme en eso de lo que estoy huyendo en esta noche muda, en estas horas solas, de pensamientos que no hablan, que son míos, que me reconstruyen desde la misma tierra que me lanzó a la vida, sujetando mi esencia desde esas húmedas raíces que sostienen mis pasos cerca de tus caminos

Ya no importa la luz y tampoco las sombras, si es que a ti no te importan. Porque me bastaría tu silencio para llenar mi oído de cántico divino; y sobran los colores que a tu lado se pierden y hasta quedan sin brillo.
Y ahora que me aferro a esta nueva sonrisa que me voy dibujando, ¿qué me importa la luz, la forma, el colorido, si te veo más allá de lo que no te veo?
Estás llegando. Ahora todo me parece real. Ahora puedo vivirlo.

Subido al Desafío de la Imagen N° 6

17.11.2005