Dedicado con todo cariño a Lébana

Hoy Carlitos fue a la escuela.
Explica a doña Remedios
que la Luna hechicera
dio a la ardilla dos premios:
proveyóle de un puente
para cruzar el gran río,
y dotóle diligente
de rayo de luz sobre el lomo.

Doña Remedios con interés
escucha la peregrina historia
y sabe, que antes o después,
le hará entrar en discordia.

Carlitos sigue contando
su aventura con la ardilla
y acaba a la maestra ofreciendo
un amuleto de pacotilla
arguyendo es el rayo de luz
que a la ardilla le dio la Luna.

Doña Remedios lo mira a trasluz
viendo es hojalata pura,
y perdiendo los estribos
lo lanza a lo lejos con fuerza.

Al ver sus esfuerzos perdidos
Carlitos, con firme entereza,
a doña Remedios le anuncia,
que la Luna se enfadará
porque a su rayo renuncia,
y nunca más le concederá
la luz del entendimiento
que precisa para enseñar,
por lo que tiene presentimiento
que él, de torpe, nunca podrá escapar.