El día 16 de octubre del 2002, una mala noticia me llegó, no podía creerla, no podía aceptarla, solo una frase larga: “lo que esperábamos paso, nadie pudo evitarlo”.
Justo en ese momento mis piernas temblaron y sin darme cuenta mi cuerpo al suelo cayó.
Lagrimas en mi rostro, mi pelo alborotado y yo en un mundo extraño.
Al despertar, en una funeraria estaba ¿Cómo me hacen esto, que es lo que pensaban?
¿Qué es lo que querrían acaso un ataúd yo elegía?
En mi casa mi abuelo triste estaba, mi abuela lloraba sin parar,
Mis tíos y hermana consuelo no encontraban y yo en un mundo extraño vagaba.
De repente mi nombre a lo lejos se escuchaba,
Era mi madre que me llamaba sin cesar,
Que es lo que querría, yo creía que con ella me iría,
Pero solo un abrazo y un beso en la mejilla mientras desaparecía.
Al momento del entierro no se que paso, mi cuerpo a la tumba casi cayó,
Mis abuelos me afirmaron, yo solo quería soltarme y ser libre en toda la inmensidad.
Y por el aire y el cielo quería con mi madre volar,
Y por siempre estar con ella en un mundo mejor,
Pero ¡NO!
Desperté y perdí el control, ahora solo sueño con ella, pero nunca logro hablarle,
¿Por que te fuiste? ¿Por qué me dejaste? Respuestas que no logro responder,
Pero aunque esto sea así te juro madre siempre te querré y te llevare dentro de mi corazón.

Te quiero mucho en donde estés nunca te olvidare.