Si un fósforo se quema tan despacio según permita el aire o la madera /apostar a la Vida nos trasciende a ser soplo/ No se puede escapar a la herida en la piel ni a chispas del amor ni al precipicio. /es trágica la historia de este animal perverso/ Insatisfechas dudas nos tiznan las certezas sueños de humo olerán a nostalgia y detrás de una lumbre buscaremos salida. /no hay pólvora que estalle si toca la humedad/ Somos siempre aprendices decapitando brasas para huir de las sombras. Un resplandor que corre hasta apagarse. Tan solo oscuridad y alguna astilla. © Silsh (Silvia Spinazzola)
Texto agregado el 10-11-2005, y leído por 134 visitantes. (4 votos)