Imagina que me miras a los ojos
Imagina que te encuentro en mi mirada
Imagina que tus ojos son los míos
Que mis lágrimas están contigo
en la distancia, junto al mar.

Imagina que nunca veré tu mirada
y no porque no me dejen las lágrimas
sino porque no quieres imaginarte en mi corazón;
porque sólo imaginar te estremece
porque sólo puedes darme eso, imaginación.

Imagina que rompes con el miedo
que te entregas en la noche
sin dudas, sin barreras... sólo tú.

Imagina que abres tu corazón
que dejas de lado el temor
que amas sin fronteras, sin límites
y por fin te rindes en mis brazos, plemanente.
que por fin volamos juntos, siempre, sin miedos.

Imagina que mil sentimientos nos inundan
que nos dejamos llevar por el placer de amar y ser amados
que nuestros ojos se llenan de complicidad.

Imagina que de una vez por todas
la libertad se hace presente en nuestras vidas
y brotan la furia y la serenidad en nuestros besos.

Por qué imaginar, si en definitiva lo más importante
es llevar a cabo esos sueños que quieren salir del interior.
Si, en definitiva, me muero por que seas mío, sin límites...
por escuchar de tus labios esas palabras, por sentir esas cosas, que a veces tanta falta hacen.