TÚ
Eres la realidad que me atormenta,
la piedra angular de mis desvaríos,
la cima de los picos más soberbios,
la estrella que taladra las tinieblas.
Eres la luz del sol al mediodía,
eres la aurora roja y vaporosa,
eres la fría cúspide de un iceberg,
eres quien sueña al ser que nos sueña.
Eres un pétalo de la rosa de los vientos,
un crepúsculo solferino y solo,
una brisa otoñal de lentos pasos,
una fragancia somnolienta y pura.
Eres el mirar transparente del diamante,
el despertar sombrío de un volcán,
el tañido ancestral de una campana,
el lamento infinible de algún ave.
Cristal luminoso, fruto encendido,
hoguera viva sobre el polo Norte,
prolífica semilla, vestal áurea,
la melodía azul de las cascadas.
Todo eso eres tú, alma palpitante,
estás omnipresente, ser ubicuo,
te veo y te presiento a cada instante,
pues a mi corazón tú das latidos. |