Sus ojos...¿qué me dicen sus ojos?...Trasmiten algo malo; ocultan alguna atrocidad inconfesable. Lo sé. Lo sé porque posee ese tipo de ojos transparentes que son sólo una cortina de los demonios que uno lleva dentro. Ese tipo de ojos vacíos y llenos de secretos al mismo tiempo. Además, se le ve muy nervioso...(Pero, ¡por qué estoy pensando en esto!, cómo puedo ser tan cruel, o vivir tan vacía como para especular o inventarme la vida de cada ser que me cruzo)
Mas, esos ojos están empezando a amedrentarme. 70 personas en el metro y he tenido que ser yo la que se siente enfrente de esa mirada de maníaco. Me encantaría poder leer su mente, ¿en qué estará pensando?, aunque, para qué me lo pregunto si ya lo sé...
Seguro que piensa en si ha dejado alguna huella. En si esta vez algo ha fallado en el crimen. Además, estoy segura que ésta no era su primera victima. Las matará por odio...por amor...por un complejo de inferioridad, por fetichismo...¿las matará porque le da la gana? Tiene que tener alguna señal en las manos de haber luchado contra esas chicas; a ver...sí, ya las veo, parecen arañazos. (Y...¿si no ha matado nunca a nadie? ¡No!, seguro que lo ha ahecho, tiene cara de psicópata, de cínico...)
Puede que busque a sus víctimas en el metro cada tarde. las espera ahí, sentado, observándolas mecido por el trequeteo del vagón, soñando con todas las barbaridades que desea hacerles.Después baja a la vez que ellas y las sigue hasta casa y ahí las secuestra para matarlas. Después, probablememnte las trocee y entierre sus cachitos dispersos por el monte.¿Querrá que yo sea la siguiente?...¡Seguro!
¡Tengo que salir de aquí, ese hombre está pensando cómo asesinarme! Ha parado, el metro ha parado, ahora o nunca, si me marcho puede que todavía esté a tiempo de vivir.
¡Ya!, estoy en el andén, él todavía no se ha movido, pero lo hará enseguida...No pienso esperarlo, sólo echo a correr, y corro, y corro...
Sin embargo, el hombre sigue sentado. Ignorando por completo que hoy, durante veinte minutos una persona ha estado convencida de que era un asesino en serie, e ignorando, sobre todo que hoy, durante veinte minutos ha ido sentado en el metro enfrente de una chica con trastorno paranoide.
Este texto responde a la imagen número 4 del desafío de la imagen. Sé que llego muy tarde, no entra a concurso, pero no he podido colgarlo antes. Saludos a todos |