Ya no quieres amarme estrella fugaz,
el miedo apagó tu luz en una noche,
prometiste no alejarte de mi jamás,
hoy tu camino mi planeta no recorre.
Me pediste que de ti yo me alejara,
que te arrancara de mi mente y mi corazón,
que mis te amo y sentimientos me guardara,
que no te amara pues traerías desilución.
Y me apena que no estés ahora a mi lado,
necesito tus palabras yo oír,
tú no sabes cuánto yo a ti te he extrañado,
mas que vuelvas no te puedo yo pedir.
Las gotas del rocío serenan mi calor,
mas no apagan las llamas de toda mi pasión,
no quieres que te mire, ni tenerme tú a mi,
el temor de un día marcharte te está alejando de aquí.
Yo fui lo que buscaste y también tu amor eterno,
me entregué a ti sin pensarlo, sin medidas, por completo,
pero te apenó necesitarme y no encontrarme,
y tus labios se incendiaron esperando a mi besarme.
Entre sueños te veía clara y pura como el día,
tu piel blanca y pelo negro me cegaron cual reflejo,
esta vida se hace eterna si no está tu compañía,
este mundo no es perfecto, pues te amo y estás lejos.
Mucho tiempo tu regreso he esperado,
y hoy no quiero que tú vuelvas a partir,
una luz de esperanza nunca pierdo,
y es que espero algún día verte aquí.
...En la vida se tejen historias cuyos lazos muchas veces ceden, a mi me ocurre, mi cuento personal está con letras doradas impresas en mi corazón, pero la distancia parece deshojar y borrar todo rastro que haya habido de ellas, al parecer, hay quienes no soportan la soledad y es entendible, me gustaría estar ahora mismo para ser yo quien cubra el viento que arrecia ese corazón por el que mis ojos brillan, y cuidar esa llama con mi vida para jamás dejar que se apague. |