Que no te enteras, Samuel, que no te enteras. Las cosas no son así. Lo que pasa es que eres un zopenco. Y esto no es de ahora, no, que ya nos lo decía padre. Millones y millones de veces te lo dijo: “Samuel, eres un zopenco”, “Samuel, mira que eres atravesao”, “Samuel eres un mamonazo”.

Pero tu nada. Erre que erre. Y así pasó lo que pasó. ¿Adónde ibas tu con 118 kilos de dinamita?. Si la carretera iba a pasar por nuestras tierras de todas maneras. Y al final, ha pasado. ¿o no?. ¿De que te sirvió pegarle fuego al ayuntamiento?, de ná, porque incluso les vino bien que se quemara el alcalde, que no le echaban del sillón municipal ni con agua caliente. ¿De qué te sirvió liarte a tiros con los de las excavadoras?. De ná, no te sirvió de ná, porque solo trabajaban emigrantes ilegales, y por esos no pregunta nadie. ¿Te sirvió de algo raptar a la hija del ministro? ¿te sirvió de algo violarla con el botijo de porcelana, sodomizarla con la escobilla del water o fustigarla con el látigo de arrear los bueyes?, no te ha servio de ná, porque la hija del ministro llevaba ya varios años siendo prespituta, y lo único que hiciste fue darle más ideas pa su trabajo.

Si es que eres un cabestro, hombre. ¿Adónde ibas con 118 kilos de dinamita?, que ibas, ¿a volar el pueblo?. No me jodas hombre.
Claro que tampoco me extrañaría, porque tu siempre has sido un cafre. ¿Qué dices?, ¿qué no?. ¿Quién tiro a su novia por un barranco en la noche de bodas?, tu. ¿Quién se comió un borrico entero por una apuesta?, tu, desde luego, ¿quién se machacó el dedo gordo del pie con un martillo por matar un saltamontes?, y ¿quién metió un tractor en la iglesia porque se peleó con el cura?, y ya puestos a hablar de curas... ¿por qué coño le partiste las costillas a Don Severino con un azadón?, ¿porque te gano al tute?. Pues si no sabes jugar, no te metas, coño, si es que encima eres rencoroso...

Ya me lo dijo madre. Y la pobre se murió con la pena de verte siendo un animal. Ya me lo dijo madre. “Cuando yo me muera, no dejes así al Samuel, ¡¡estrangúlalo, por Dios!!”... Y no la hice caso. ¿Y que es lo que haces tu?. En vez de enterrarla, la tiras al pozo del boticario. Y con la de tiempo que hacia que no se lavaba madre. Y el boticario bebiendo tres semanas hasta que se dio cuenta, y encima electrocutas a su mujer. Que si, que lo de su mujer fue un accidente, pero la dejaste mas frita que Carracuca. Mandan cojones. Ahora no puedo entrar en la farmacia sin que me se salten las lagrimas, ni sin que el boticario intente partirme la cabeza con una estraleja. ¿Sabes cuanto tiempo hace que no puedo comprar condones?

Y ahora esto. ¿Pero donde ibas tu con 118 kilos de dinamita?. Y en una carretilla. Y para mas inri, fumando. Y ahora, no me pongas esa cara, leñe. Ya sé que solo hemos encontrado kilo y medio de tu cuerpo. Pero no me pongas esa cara. ¿Qué culpa tengo yo?. Cualquiera se sube a la torre de la iglesia a por tu pierna, con lo alto que está. Y los perros que se estaban peleando por tus entrañas no sé a donde se fueron. Le sacudí dos tiros a uno, pero no creo que le diese.
Si ya me lo decía padre. Y mírate. Ahora cojes en una bolsa del Alcosto . Pero esto ya lo sabía yo. Esto se veía venir. Como te lo digo, se veía venir.