Los sonidos del amanecer impiden a José seguir con su sueño. Los primeros pasos de los trabajadores comienzan a decorar el armonioso inicio de la actividad en la ciudad. José como todas las mañanas de los últimos 5 años, había comenzado su día leyendo el diario, el mismo diario con el que amanecía envuelto para combatir al cruel frío de invierno.
José hoy, sentía un clima diferente en la ciudad. No se respiraba el mismo aire de siempre, la gente lucía mas preocupada de lo normal, además a medida que pasaba el tiempo, las cosas iban luciendo mas raras aun, de hecho eran muy pocas las personas, pero lo que mas llamaba la atención era el clima en sí, el sol parecía disgustado, estaba todo nublado. José se acercó a un negocio de electrodomésticos donde todas las mañanas veía el noticiero, las letras estaban en rojo, la noticia era en vivo, un móvil desde el seno de las Naciones Unidas, el periodista parecía agitado, los ojos llorosos, susurraba “es el fin, es el fin”, José no entendía, ¿el fin de que era?, ¿de la pobreza?, ¿del desempleo? ¿Qué sucedía acaso?.
José se atrevió a preguntarle a una señorita que allí se encontraba al igual que él observando las noticias, -¿Qué sucede señorita?. Pero la señorita ni siquiera lo miró a los ojos, simplemente manifestó un gesto en la cara, una gesto de desprecio, Jose ya estaba acostumbrado, por lo cual decidió ignorarla, y sostenía su pregunta -¿qué sucede? ¿Que pasa?. Un joven lo invita con la mirada, Jose se queda mirando y se acerca, y le dice- disculpe joven, ¿usted podría decirme si sabe que es lo que sucede?. El joven sonríe y respondió a este- buen hombre, sucede que lo que creíamos haber superado tras la caída del muro de Berlín y la crisis del régimen comunista ha vuelto, en América Latina se han dado doce revoluciones, principalmente en centro América, y en América del sur Venezuela, Bolivia y Brasil han propagado el comunismo como doctrina oficial, mediante el uso de la fuerza, África toda ha caído a excepción de Sudáfrica, En Asia todos los países menos Japón, Singapur y Corea del Sur se han unido en un gran co- gobierno con la República Popular China, incluso India y Pakistán han hecho a un lado sus diferencias y se han unido bajo una misma causa, en medio oriente se han acentuado los conflictos políticos contra los musulmanes.
José quedó impactado no podía creerlo, pues mas allá de su condición de vida él siempre había tenido inquietudes de tipo político, y entendía que se estaba dando un cambio significativo, el joven continuó,- pero eso no es todo, la Unión europea se ha dividido en dos, los países del este se han unido nuevamente a Rusia, la cual se ha aliado con China, y los países tradicionalmente occidentales se han aliado inesperadamente, exceptuando a Suiza y Alemania, en Suiza se ha instaurado la Anarquía, y en Alemania los nacional socialistas, estos últimos han vuelto a las viejas alianzas con los rusos, no así con los japoneses, ni tampoco con los italianos los cuales han estrechado lazos férreos con Estados Unidos. José pregunta – y todo esto, ¿ocurrió anoche?. Con una sonrisa sarcástica el joven responde – No señor, disculpe, quizás me apresuré demasiado es que estoy demasiado alegre. Lo sucedido en las últimas semanas no es mas que el cúmulo de hartazgo el cual nuestra sociedad ha soportado durante los últimos 30 años. Estos hechos que parecen aislados y casuales son cuestiones que se han dado en la última semana en representación de siglos de opresión social, además solo que hoy ha sesionado la Asamblea General de Naciones Unidas, y el problema es que Estados Unidos, está denunciando al “enemigo comunista” de haberse ocultado cobardemente durante los últimos 13 años, y declaró abiertamente el estado de guerra y cese de las misiones diplomáticas contra Rusia, China, Alemania y todos sus aliados. José por lo bajo pregunta al joven – Disculpe joven, y a todo esto, Argentina, ¿Cómo se ha manifestado? ¿Qué ha manifestado?. – Aunque le parezca extraño Argentina en este momento es uno de los países de mayor relevancia en el conflicto pues aún no ha decidido una posición, por lo cual se ha declarado naturalmente neutral, que “ayudará a todos sus amigos que le pidan ayuda, a cambio de la cancelación de las partes de deuda que argentina tuviera con ellos, si me disculpa buen hombre, viendo sus condiciones de vida, le recomendaría que fuera hacia alguna zona rural, a La Pampa quizás, o al interior de la provincia de Buenos Aires, ya va a ver que va a obtener un trabajo honrado rápidamente. José sonríe y pregunta -Disculpe joven, ¿me permite preguntarle algo? La primera duda es, ¿cómo sabe usted tanto? La segunda, ¿Cómo han de llamarlo?, Sin embargo debo agradecerle pues a fin de cuentas se ha cumplido la profecía de “el General” Argentina es nuevamente unos de los polos centrales de la realidad internacional, entonces aprecio su voluntad en el consejo, y por último, como supongo que no me dirá su nombre, solo me resta desearle suerte y éxitos en lo que sea que este usted entrometido, así también como mi deseo que si algún día nos volvemos a ver, tenga la misma cortesía de hoy. El joven estrecho su mano, y siguió caminando, José ya había vivido estos momentos 28 años atrás en la época de la dictadura, cuando él veía a su padre militar junto a los “montoneros”, por lo cual, toda esta situación no era sorpresa para él, el ya lo había vivido de lleno en su infancia, quizás las pocas ganas de vivir, quizás tantas desgracias acumuladas, sin embargo, así como el mundo cambiaba, Argentina cambiaba, José cambiaba, “nunca es tarde para aprender” le decía él a las personas que vivían bajo las mismas condiciones suyas; pero algo había cambiado, él no tenía para ganar mucho mas, ni esperar mucho más de esta vida, por lo cual, decidió aplicar lo que sabía, pero no trabajando, sino volviendo a la militancia política, para que los jóvenes del presente no cometiesen los errores del pasado, en un futuro no muy lejano, además José presentía que se acercaba un cambio.
- Buenas tardes.
- Buenas tardes Don José, hoy el comedor de beneficencia no está activo porque nos han recortado el presupuesto.
Sonríe José, y con brillo en la mirada responde,- disculpe jovencita, pero hoy, vengo a enseñarle a los compañeros, he decidido volver al partido del General, los principios deben ser reivindicados si deseamos superar esta crisis con los mismos objetivos bajo los cuales se formo este primer movimiento verdadero de masas.
- Como usted diga Don José, de todos modos, entre usted y yo, le confieso que usted es uno de mis favoritos, así que después de la reunión pase por aquí que le tengo preparadas unas empanaditas.
- Muchas gracias joven usted siempre tan atenta.
La gente estaba alegre, todos gritando eufóricamente, estaba en el balcón presidencial, el mismo desde el cual los presidentes daban sus discursos una vez asumido su cargo como tales, estaba hablando, se veía mas maduro en sus gestos, sus rasgos, incluso en su hablar, aquel joven que una vez le había hablado a José el abuelo de Antonia, que le había hablado una vez como si tuviese un arma en la nuca, el mismo se había convertido en uno de los mejores oradores que José, hubiera escuchado en su vida.
José le dice a su nieta, - Antonia, llevame hacia “La Rosada” ese señor que esta ahí hablando es amigo mío.
- No abuelo, estás loco, tomate la pastilla que te va a hacer bien, no seas cabeza dura, ese es el señor presidente, ¿De dónde podrías conocerlo vos?
- Hace treinta años que lo conocí mas o menos, allí por el dos mil cuatro, en las épocas de la III Guerra mundial, justo un día antes de enamorarme de tu madre, la cual era muy jovencita por aquel entonces.
- Abuelo, estás loco, nos volvemos a casa al final nunca se puede hablar en serio con vos ni te puedo sacar a pasear a ningún lado, ahora solo falta que me cuentes otra vez esa historia en la cual vos vivías de lo que juntabas de la basura de otros, ¿No es así?
- Antonita, ojalá algún día les enseñen en la universidad lo que realmente sucedió en esas épocas negras, que ya nadie quiere recordar, pero alguien tenía que hacer el trabajo, y me siento muy orgulloso, vas a ver que este presidente va a hacer las cosas bien.
Un hombre luciendo traje y gafas oscuras le dice a uno vestido igual a él mientras descargaba cosas de un maletín, - dale apura que este flaco ya termina.
El otro hombre se prepara, le sudan las manos, jamás había estado tan nervioso, simplemente se relajo escapándosele una lágrima y liberó la crisis absoluta, la gente grita, los cuerpos de seguridad cubren al presidente y van en su ayuda, era demasiado tarde, él era demasiado bueno, los balcones de “La Rosada” se habían teñido de rojo.
Argentina estaba siendo invadida en todos los puntos del país, la guerra de la cual creían haber escapado, ahora la buscaba a ella “la neutral”, el granero del mundo ahora solo sería parte del ejército de clones de la “Alianza Anglosajona”. Los argentinos solo podían refugiarse, y sobrevivir a como diera lugar, el caos se había hecho presente.
Se acerca y dice- disculpe joven, ¿usted podría decirme si sabe que es lo que sucede?. El joven lo mira se le ríe en la cara, y se marcha, José nuevamente se había hecho la ilusión de que algo en este mundo podía cambiar, que un joven algún día se vería interesado en las demás personas, pero las cosas seguían igual que siempre, subieron el volumen del televisor, el hombre que antes no se escuchaba, y parecía decir “es el fin, es el fin”, resulta que hablaba de la protección del delfín mediante una resolución de Naciones Unidas, José con una mirada irónica piensa – Al menos los delfines tendrán derechos, pero ya los voy a ver juntando almejas para ver si consiguen cambiarlos por alimento algún día.
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