Victoria clamaban los espiritus
victoria de los cinco aliados
victoria de todos los soldados
mas el destino era veneno
y los gritos de alegría
en rabia se convirtieron

Rojas brillaban las espadas
y la lluvia con sus aguas
trataba de limpiar la tierra
de la sangre de hermanos
del odio de los aliados
cuyos muertos se hundían en el barro

Y negro lloro el cielo
lagrimas divinas
trayendo la muerte
arrebatando la vida
lagrimas negras
caían de las estrellas

Odio y Muerte de la mano
Espadas en alto
Festín para los dos hermanos
Muerte y Odio en cada tajo

Campo de batalla
Convertido en cementerio
Sangre y aguas negras
Campo maldito para siempre
Donde no brillan las estrellas.