¿Estás enamorada?. La pregunta resonó en sus oídos como si una voz lejana la despertara de un sueño ligero y la interpelara.
No era para menos, sentía que estaba viviendo de un recuerdo, que siempre estaba acompañándole, no tenía respuesta, sólo acertó a decir NO, y eso la sorprendió.
La interrogante entonces era, algo más complicada, estaba enamorada de alguien, de su recuerdo o simplemente del amor, ese sentimiento que genera tantas pasiones, que desborda tantas alegrías y también que nos invoca alguna tristeza.
La pregunta hecha tan repente ha resonado en sus ideas, a lo largo de estos días, le ha dado sino tristeza, algunos momentos de reflexión sobre sí misma, sobre el tiempo, sobre el pasado y sobre el presente.
Estar enamorada, es un estado de cosas pasajero o un tributo permanente a saberse que cada uno y cada una estamos vivos, que a pesar de la apariencia, de ser correspondido o no…, se asume el desafío de amar, aún con los peligros que encierra, con subvertir la lógica formal…, o con desafiar al tiempo….
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