No lo había pensado, lo delicioso de lo prohibido hoy me he dado cuenta que las palabras no tienen valor, que las caricias son aquellos sentimientos envueltos en un lenguaje inexplicable.

Hoy me has revelado que el amor no es necesario, que mientras tenga aquel roce de tus manos en mi mejilla puedo ser realmente feliz.

Hoy, hoy! me has mostrado que no es necesario sufrir, que los sentimientos son validos, pero que para sentirme tan bien solo necesito estar tranquila.

Hoy, no necesito tus palabras, son un estorbo, que aunque surge de tus labios, no son tan reconfortantes como tus besos.

Hoy es indispensable el silencio, para poder mezclarnos con el aire, para flotar en el agua, para dejar fluir los sentimientos.

Y ante todo hoy necesito de ti, no por una voz que me declare su amor o una que me reproche, simplemente para que te des cuenta que Felicidad no es un palabra sino una caricia.