EL PERIODISTA


Las cualidades de los conductores sociales son como el viento, las de la gente común como la hierba. La hierba siempre se inclina en la dirección del viento (Confucio)

-¡ Paren las màquinas, tengo una noticia sensacional!
Asì vociferando entrò en la redacciòn el joven periodista
-¿Què pasò? Preguntò el redactor en jefe
-Acaban de asesinar un mendigo cerca de la editorial.
-¡Pero vos no sos màs pelotudo porque no te entrenas! Siempre asesinan a alguien en esta ciudad, lo reprendiò el jefe.
Era un joven haciendo sus primeras armas en la profesiòn asi que, con un gesto paternal, el hombre dejò pasar ese momento.
Se fue formando en el medio y cuando consideraban que ya estaba algo maduro le encargaron algunos reportajes a miembros de la faràndula.
Posteriormente le tocò trabajar en el àmbito polìtico.
-Tienes que ser totalmente imparcial, lo que importa es la noticia, aconsejaba el jefe.
Eso tratò al principio, luego como su nombre y fama creciò, se convirtiò en un periodista adepto al gobierno de turno.
Sus reportajes a miembros del partido gobernante no eran muy bien recibidos en la redacciòn, pero obligadamente los publicaban por temor a quedarse sin trabajo.
Hasta que un dìa renunciò.
Al poco tiempo era el conductor de un programa polìtico en la televisiòn.
Por supuesto que el programa se encargaba de destacar la excelente obra del gobierno con fuertes y àcidas crìticas a los opositores.
Era algo asì como el gurù del gobierno, aconsejaba sobre polìtica, economìa, sociedad, cultura, justicia social y cuanto tema afectara a su idea polìtica.
-¡A estos negros hay que educarlos! Sostenìa refirièndose a los votantes.
Esto le aparejò una notable mejorìa en su economìa personal.
Ya no se le veìa viajando en subterráneo, ahora vestìa ropa de marca y costosa y se trasladaba en un automòvil importado, con custodia.
Hubo una elecciòn muy reñida. Êl fue el encargado de denunciar un fraude ante los medios periodìsticos.
El gobierno perdiò.
Èl tambièn.
Ahora, en un pueblo perdido en la inmensidad pampeana, es propietario de un semanario cuyas noticias principales consisten en hacer conocer a los lugareños quien se muriò, o quien guarda cama con un final anunciado:
-“Que Dios le brinde eterno descanso a su alma”
-“Esperamos que mejore”

Tortuga