Por mi cuenta comparto plenamente las ideas suicidas, y no enjuicio, pero sí quisiera que la gente "normal" no crucificara a aquellos que sí poseemos en nuestros pensamientos e ideologías la posibilidad de un suicidio... Son distintas las circunstancias las que lo llevan a uno el tener presente dicha opción, pero siempre son los mismos antecedentes, el dolor interior, de sentirse mal con uno mismo, de ver que todo puede ser tan lindo lo que a uno lo rodea y ni siquiera uno puede ser visto por los "ojos" de los demás para poder disfrutarlo junto a ellos, es apartado por los demás, y por ende, uno tiende a apartarse luego de llevar varios años en las mismas circunstancias... A otros los aqueja el dolor físico, mucha gente tiende al suicidio para evitar algún dolor de tipo eterno en sus vidas... ¿qué es mejor?, ¿sufrir por siempre con algo irremediable o dar por finalizada la vida propia?... Aquí es donde muchos sacan el tema de la religión, el hecho de que Dios nos da la vida y Dios nos la quita, pero ¿hasta que punto es cierto?, o sea, ¿porqué Dios nos da la vida siendo que uno no puede hacer con ella lo que quiere y se la pueden quitar en cualquier momento?... si realmente Dios nos da la vida, creo que es para que cada uno decida por uno mismo, ya sea en forma correcta o errónea, pero la decisión es DE UNO!!!...

No piensen en los demás, piensen en su propio dolor, si ven que es leve y reparable, medíten cualquier decisión a tomar, y si es muy profunda la herida que llevan consigo y ya han pensado lo suficiente en el suicidio, y tienen todo listo, sólo queda hacerlo, sin mirar atrás... quizás algo mejor habrá despues de morir definitivamente, y si no es así, no creo que sea peor que en vida...


Les doy una tecnica para lograrlo...

Técnica: Inyección Mortífera Casera
Tiempo: Dos minutos.

Disponibilidad: Alta. Los elementos fundamentales son tres jeringas para llevar hasta
tu torrente sanguíneo la secuencia de fluidos:

agua salina,
barbitúricos,
clorato de potasio.

Puedes hacer un práctico set (aproximadamente de 15 cms. de ancho por 45 cms. de alto)
para sostener las botellas en posición vertical invertida, e incluso pensar en un switch
desde el cual puedas controlar todo el funcionamiento desde la comodidad de un sillón.
Las posibilidades dependen de tu imaginación.

Funcionamiento: Una primer jeringa descarga la solución salina (aparentmente una receta
tradicional del célebre doctor Kevorkian). La segunda conduce a tus venas los barbitúricos
en suspensión que te inducirán al sueño. La tercera te inyectará el clorato que detendrá
tu corazón de manera instantánea, así como un relajante muscular que evitará los molestos
espasmos que aquejan a los moribundos.

Efectividad: Excelente, si se utilizan justamente las sustancias antes mencionadas.
Reemplazar los agentes tóxicos por otros diferentes puede ser más económico, pero podría
redundar en un decremento en la eficicacia de esta técnica (obsérvense miles de casos de
intentos fallidos de suicidio por tratar de utilizar ácido muriático como veneno). Una buena
inversión bien podría valer la pena.

Notas importantes:

1.- Recuerda utilizar siempre jeringas esterilizadas, preferentemente desechables.
En estos días no se sabe qué infecciones puedas contraer al usar jeringas contaminadas.
Cuida tu salud. : P

2.- No olvides asegurarte de confeccionar un medio mecánico por el cual se activará
automáticamente la tercera inyección (la buena) luego de activar la segunda (la que te duerme).
Sería bastante penoso despertar unas horas después y descubrir que sigue sin pasar algo
interesante con tu vida.

3.- La idea central de esta técnica suicida es la muerte sin dolor. Sin embargo,
para algunas personas esto puede equivaler a aburrimiento. Para una experiencia más emotiva,
sería más adecuado recurrir a técnicas como decapitamiento por motor, auto-bomba, etc.