llevó la fama a lomo de mula
la acompaña el fusil del lucero de la luna
me pregunto..
¿qué gracia no quiso darme el cielo?

Ja, ja, ja, vaya manera tan estúpida
De iniciar un poema,

Y fingí, diciéndole a mi conciencia,
Que dejase de ser un inconveniente,
Así que ahora si escribiré un poema
De esos donde no se pierda nada,
Y se encuentre todo en su lugar.

Pero antes de escribirlo,
Le he de platicar mis sentimientos,
Quiero ser un poeta ilustre,
Con fortuna y muchas leguas de letras,
Que pese sobre mis hombros,
El honor de mis ancestros
Y la gracia de mi sangre,

Porque la piedra
Que en mis hombros veo,
Es el compromiso
Con mi verbo,
Con mi propia conciencia,

Mojar mis labios
Con el licor suave de Cervantes,
Con los aromas de Sor Juana,
Las acariciantes letras de Bequer,
Y de tanto y tantos poetas precedentes.

Colocarme una guirnalda de laurel,
Sin envidiar la agudeza de Lope de Vega,
El bien decir de Shakespeare,
o la realeza de Netzaulacoyotl.


Desta verdad que hoy poseo,
He de vivir en ella,
De morir por ella
De sentir y amar en el infinito,
Paraíso de las letras,
En esta verdad que arguyo,
Soy comunión con las letras.