Inicio / Cuenteros Locales / cao / El Asesino de las Barbies
uNo
Aquella tarde soleada de comedias por la tele, de chalas y poleras, Catalina esperaba ansiosa sentada en el living la llegada de sus amigas. Era un día feriado en mitad de semana, sin clases en la escuela, papá estaba de viaje y mamá cabeceaba en su pieza. Sus chapes de delfines de colores en el pelo, su vestido floreado, zoquetes y zapatitos de charol, justificaban sus ansias porque las niñas no tardaran en aparecer. Para esta cita había dispuesto todo en su habitación de modo tal que nada debía faltar en aquella jornada larga de juegos y comadreos de niñitas de apenas cinco años.
dOs
Tan pronto Catalina abrió la puerta con sus pequeñas manitos se encontró de frente con la imagen angelical de la Pao y la Carolina. Sus amigas llevaban unos extraordinarios peinados y ropa con todos los colores del arco iris. Sobre los hombros la correa de las carteras rosadas y calipso las hacían aparecer como muñecas gemelas pero de distinto color. Los besos, los saludos y las finas caricias al pelo se hicieron presentes de inmediato entre ellas.
La dulce y pequeña anfitriona no tardó en invitarlas a pasar al living. Sobre la pequeña mesa de centro las bebidas de fantasía y las galletas tritón con rellenos de crema de vainilla y frutilla, las obleas de helado y las morochas de chocolate; daban una cordial bienvenida a las amiguitas que Catalina conocía desde el jardín infantil. Por supuesto que todos los artefactos dispuestos sobre el vidrio de la mesa eran de plástico original: las tacitas, los vasos, los platos, las cucharas, todos formaban parte del nutrido juego que recientemente le había traído el mismísimo viejito pascuero desde el polo norte.
tReS
Sentadas en los sillones con sus pies colgando tras la flexión en las rodillas; las amiguitas bebían la gaseosa y comían galletas felices de haberse encontrado nuevamente. Hablaron de todo: de cual era el perro más bonito, la barbie más estupenda, de que si Arnold amaba realmente a Helga Patakis, de lo llorona que era Olga su hermana mayor, de la ternura de Barnie, de la belleza de Gokú, de la mochila de Bob Esponja que le habían comprado a la Pao, del nuevo corte de pelo que llevaba la Caro. En síntesis de todo lo que se pudiera conversar al son de las canciones de 31 minutos antes de pasar a la habitación de la pequeña anfitriona para la ya acostumbrada maratón de muñecas.
Catalina se enorgullecía de sus muñecas, sobre todo de sus barbies, papá le había obsequiado un montón de ellas; la más bonita de todas era la barbie rapuncell. También los artefactos eran muy preciados para ella: el auto de barbie; la casa de barbie, la terraza de barbie y la motocicleta. Estas muñecas eran su encanto junto a los peluches. Winnie poh, las bananas en pijamas, bellota, minie, bob esponja y calamardo, pequeño el oso, tribilín el perro y tinki winky; eran parte de su familia y ocupaban un lugar privilegiado en su habitación y en su diminuta alma de ángel. Sus amigas eran felices entrando a su habitación y jugando con ese universo de juguetes.
cUaTrO
Catalina iba primera cuando las niñas subieron las escaleras de la casa; por eso cuando apenas se asomó al pasillo del segundo piso donde se encontraba su habitación, se asustó al ver salir de ella esa pequeña sombra. La imagen era rapidísima y no emitía ruido sobre el cubre piso, aparentemente debido a que no llevaba puesto zapatos. Catalina solo pudo percatarse que aquella aparición terminó su sospechosa travesía metiéndose en la habitación de sus hermanos, al fondo del pasillo. Cuando la niña entró a aquel lugar solo pudo darse cuenta de la presencia de Joaco su hermano mayor, considerablemente superior en altura que aquella imagen proveniente de su habitación. Por otro lado y según tenía entendido Dante, su otro hermano un año mayor que ella, dormía una siesta metido bajo las tapas de su cama, y así lo pudo constatar al ver el bulto de su cuerpo metido en las profundidades del colchón. Nada hizo presumir a la niña la desgracia que vendría después, cuando salió de allí y se dirigió hasta su habitación donde la esperaban la Caro y la Pao.
Apenas enfiló por el pasillo vio salir a sus amiguitas con caras de pánico; un grito incontenible se les escapó. De inmediato Catalina corrió hasta el lugar y aunque las niñas intentaron agarrarla para que no entrara al lugar el esfuerzo fue en vano.
El grito despavorido de la niña hizo que mamá saltara de la cama y corriera hasta aquel lugar. En la entrada antes de dar con la repisa de los juguetes las niñas y el hermano hacían un taco. Cuando mamá traspuso el umbral el espectáculo dantesco que tuvo frente a sus ojos encendió todos sus sentidos.
Sobre la cama los cuerpos inertes de todas las barbies de Catalina, y sobre el piso sus cabezas esparcidas por todos lados. Ninguna se había escapado de la feroz decapitación.
Mientras mamá tomaba en brazos a la niña tras recolectar todas las cabezas,llamó la atención de todos que pese a los gritos desgarradores el Dante no se hubiese despertado; y permaneciese quieto en su cama. Por eso que mamá no tardó en acudir a despertarlo. Sin embargo tras levantar el cubre cama sobre el colchón solo encontró una almohada atravesada perpendicularmente.
CInCo
Metido bajo la cama en el rincón más profundo el arrepentido niño escuchó el grito amplificado de su madre: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡DANTE FERNANDO!!!!!!!!!!!!!!
|
Texto agregado el 11-10-2003, y leído por 2780
visitantes. (12 votos)
|
|
|
Lectores Opinan |
|
|
|
|
|
|
12-04-2008 |
|
me gustó, pero tengo sentimientos encontrados con el título, me restó un poco de emoción, pero tal vez mejor así, sino me habría sentido de cinco años otra vez. Buen cuento eride |
|
| |
|
|
03-04-2008 |
|
jajaja mi madre también me llamada con mis dosnombres cuando hacia alguna de las mías, que buen texto me recordó a mi hermano, y mis cosas cuando eramos niños , gracias . alteasalta |
|
| |
|
|
05-12-2007 |
|
Decapitador encontrado, con un relato extraordinario. Fast |
|
| |
|
|
12-12-2006 |
|
Muy buena narración , e disfrutado muchisimo estas hermosas historias tuyas.
mapata |
|
| |
|
|
12-05-2004 |
|
Anda! no había visto este.
Me uno a hache en el comité pro-dante.
Y otra cosita... no hay nada más mordisqueable que las piernas de las barbies. Intentalo en secreto o pregunta confidencialmente a Dante. Verás cómo tengo la razón. santacannabis |
|
| |
|
|
06-01-2004 |
|
jajajaja...es divertidisimo .. me da que pueda estar basado en hechos reales.. o no? rnahimla |
|
| |
|
|
15-11-2003 |
|
jajajaja, DANTE FERNANDO!!!!, ésa sí que estuvo bueno. Oye, tu capacidad descriptiva me impresiona realmente, porque me imaginé toda la escena, y me identifiqué, excepto por lo de rapuncell, en mi época no existía, ah, bueno y el resto de las custiones de barbie, porque tampoco las tuve. Tú sí que eres un pedazo de ternura escudado en un kamejá. Un besazo! blanquita |
|
| |
|
|
20-10-2003 |
|
Un relato que me provoca ternuras y una risa de complicidad con Dante, concuerdo con Hache, ya repara su honor...por favooooor. La narración va en aumento, la tensión crece y el lector avanza veloz por las letras para tratar de enterarse de ese desenlace que no era el de las muñecas decapitadas, sino el descubrimiento del agresor. Mis estrellas. FaTaMoRgAnA |
|
| |
|
|
16-10-2003 |
|
Muy bien narrado realmente sorpresivo, pero me choco un poco ya que me considero a fanatica de esa fria y rubia amiga de la infancia. Dammar |
|
| |
|
|
13-10-2003 |
|
Otra aventura memorable del mundo de los que mañana vendrán a ocupar nuestros lugares. Estupendo. Un abrazo. FALCON |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
ZAZ!!!!!!! Otra vez con el Dante!!!!!! Como presidente del comité pro defensa de Dante, te conmino a que hagas un cuento donde el acróbata sea reivindicado. Que el que a su padre se parece en nada se desmerece! vamos...Y lo que se hereda no se roba...bras vis...siempre él, siempre él...pufffffff...precioso! pero calumnia infame! hache |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
? LaMaGa |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
Excelente relato Cao, narrado con la perfección de siempre, ya sabés todo lo que se esconde tras estas palabras a mí parecer. Un beso y mis estrellas. MCavalieri |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
pobre Dante... el papá lo va a asesinar, nadie entiende que sus travesuras son parte de su genialidad. La princesita al menos está con sus amigas que la van a consolar, el Joaco de seguro los va a analizar a los dos. Un cuento precioso, con la gracia de la infancia, su dulzura y también su sordidez. Saludos niño, mis estrellas para ti. CaroStar |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
Bonita historia, supongo que Dante pretendía inventar la "Barbi decapitada", con algo tenía que experimentar. Seguro que no fué Dante el hibernó a la tortuga? nomecreona |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
muy bueno. una mirada al mundo infantil. un saludo Martin_Abad |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
Bárbaro! primero me clavé en la princesa de los rapónchigos y la suerte de su amado, la condena, por andar de trepador si recordamos, fue perder los ojos, perderse en el desierto y al final lograría recuperarles con lágrimas de su amada... pobre Dante, ojalá no le toque más que una buena tunda (mira que desgraciado! jaja) un beso aitana |
|
| |
|
|
11-10-2003 |
|
Jiji, ¿habré perdido toda mi humanidad? no pude evitar esa sonrisa escapada ante el escenario del crimen. Pobre Dante la que le espera¡¡. Este es el tipo de cuentos que me transportan años atrás, me ponen dos coletas de la zo rojo y desparraman mis muñecas por la habitación. Genial. Besos burbuja |
|
| |
|
|
|
|
|
|
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|
|