Venezuela era una gran despensa, como la gran despensa de un barco.

La esperenza consistía en que la despensa durase pá rato largo.

Aquí hay petróleo, aquí hay hierro, oro y aquí hay mujeres.

La mentalidad de la política venezolana nunca ha sido otra cosa más que ser los dueños de tal despensa para beneficio propio.

A cambio le arrojaban a las gentes unas migajas... si tenías suerte, a la que llamaban palanca, te conectaban. Imagínense a una manguera sacando agua de un pozo... durante mucho tiempo venezuela no fue otra cosa.

La despensa permanece abierta, pero se multiplica la gente abandonada y estas se convierten en una fuerza. Ya hartos, no les interesa saber cómo es que funciona la cosa.

La ideosincracia: Montarse en un avión con una maleta llena: personajes típicos que finalmente nos han llegado a caer simpáticos, y a los que tratamos como parte de lo que somos.

Venezuela no ha sido más que un pozo del que se saca teniendo suerte. Una tierra de lotería, de hipódromos para un pueblo y de galleras y helicoides abandonados.

Un error tan craso para la administración de un país (porque recuerden señores que en los paises viven gente), se convirtió en el "así son las cosas" de la gente.

Vaya educación para el pillaje.

El depósito sigue abierto, pero el barco tiene un nuevo Capitán, desconocido, por no tener la misma actitud de lo "conocido" por la gente. Se mueren de arrechera de no saber en manos de que tipo de actitud que no otorga favores se encuentra el tesoro.

El tesoro de un país no es algo de lo cual se va tomando hasta que se acabe SEÑORES!!!. Los favorecidos de antes, que se contenten con lo que tomaron y, si adquirieron deudas, pués que se peguen un tiro en la frente. El tesoro de un país se invierte en el bienestar de la gente porque es fuerza de producción, una gente con esperanza de subsistir mediante su propio trabajo sin tener que jalarle bolas al governador de ningún estado para que lo conecte, produce, ingenia, crea, y enriquese el tesoro.

Filtrar aguas en el estado portuguesa y en todo el país para que la gente no se muera no es echar dinero a los pobres por populismo: es tener conciencia de que la riqueza de una nación está antes que nada en su gente, y no en pegarse otra lotería para demostrar en el exterior la bajeza de nuestros comportamientos. Vías de comercio y transporte no es montar un trensito de Disney pá que los pobres sepan como es eso. La gente a la que el parasitismo social del que busca donde haya pá robar porque es bueno, trata de chusma y ñero, es gente mucho más seria y digna de lo que se cree.

Hay dos opciones ideosincráticas


¿Qué es un país?

1.- Un lugar en donde hay y se le agota hasta que nada quede para después mudarnos a otra parte como langostas que todo lo acaban.

2.- Un lugar con posibilidades de crecer a través de su gente.

Al primero en Venezuela lo llamaron "Democracia"

Lo que no entiendo es por qué al segundo lo llaman "Populismo"

Que el Capítán continúe manteniendo esta catarsis e ilusión de que el barco se está hundiendo... escucho ahora gritar a las ratas de miedo.