No es el agua o el mas dulce almíbar; es tu boca por la que urge mi boca No son las pirámides de Egipto o acaso el mas mágico atardecer Es tu cuerpo desnudo el que urge a mis ojos No son riquezas ni poder o acaso la gloria de dios Es por tu corazón, que urge mi corazón.
Texto agregado el 28-09-2005, y leído por 134 visitantes. (2 votos)