Flotando ingrávido, en las aguas, soñé con una sonrisa.
Me sumergí entonces, y escuche el silencio.
Una caricia acuática, me hizo prestar atención y por un momento, en el agua, creí ver de nuevo un rostro difuso.
Y me enamoré de mi reflejo.
Texto agregado el 27-09-2005, y leído por 166
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Lectores Opinan
27-09-2005
Gran título y grandes líneas las tuyas. Muy visual y sensitivo. Me gustó. Efecto_Placebo
27-09-2005
Tienes mucha habilidad para crear fuerza en las imagenes.. has descrito perfectamente esa risa nerviosa propia de la desesperación, de la impotencia.. de la locura.. un susurro* susurros
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