El tórax se comprime y se expande. La nariz de profundas cavernas inspira y expele pequeñas cantidades de aire espeso. Acompasado, este aire enrarecido, tibio y húmedo, se detiene, un instante, para luego entrar decidido por ese par de túneles arbolados. Un sonido de trueno lanza una gran ola de pequeñas gotas que caen sobre el pelo, los dedos, o se evaporan dejando una huella tenue a contraluz. La boca se cierra obstinada. Pero quiere abrirse. Y lo hace, se expande. Miles de arrugas se disuelven y el aire vuelve a temblar y a estremecerse, con un suspiro que se enreda en las paredes, viaja hacia el techo, bajando sigilosamente por el lado más oscuro. Las sombras tiritan, chocan y se quiebran con otra sombra, que recibe el impacto de esa fuerza aérea. Los labios engordan, la lengua salta en un charco de saliva que estalla en una cascada. Una mano se eleva indecisa. La otra acaricia lentamente los ojos, la nariz, la boca...cuenca de carne que se dilata y destila humores nocturnos de ronquidos estériles. Duros los músculos de una pierna y la otra, gimen y se estiran al compás de los aullidos de los gatos en el tejado. Un poco más allá, las sombras se dividen, se desgajan. Una abandona su escondite y empieza a deslizarse lentamente por el suelo. Luego, crece y se agiganta en la pared contraria, para descargar rápida y profunda sus tenazas sobre esa carne azulada, que baja y sube sin descansar. Explota el universo de energía y partículas, se juntan y dispersan en un viaje sin fin. El cuello se enrosca. Se estira buscando el aire, mientras las piernas se retuercen, se levantan, se agitan. Las manos, los dedos se aferran a las sábanas. Luego se abrazan con la sombra, llevando consigo el lienzo manchado. El cuerpo se vuelve un arco disparando músculos y tendones, venas infladas de vida que quiere escapar. Y las piernas vuelven a encogerse, se juntan, se besan, se aprietan, un nudo de fuerza las empuja. La sombra cubre el cuerpo, lo absorbe, lo chupa, lo amasa, lo azota, lo tira de aquí para allá. Otra fuerza, caída del cielo , del fondo profundo de un pozo emerge...Y grita la boca..abierta, anhelante....