Viajero: las piedras del camino te hieren los pies. Te laceran el alma mientras caminas rumbo al nuevo horizonte. A lo lejos, el rumor del mar te inquieta, las olas rompen contra el faro centenario. La orilla del mar se hace tu amiga. Acompaña tu caminar tranquilo, recorres la orilla con una sonrisa y sientes el aire que penetra en tus pulmones.
Viajero: las últimas luces del día, iluminan tus pisadas lentas en la arena.
Viajero: es largo el camino que has recorrido y la posibilidad de refrescar tu mente es casi nula.
Viajero: el mar es tu amigo...confiésate con él.
Abrázalo y abárcalo con tu mirada amplia y perseverante. Eres parte del mar y de la luna. Parte del viento y de todos los hombres. Parte de la tierra que te dió la vida y de la larga cadena de hombres que antes que tú caminaron por esa orilla. Eres parte de un inmenso todo que compones y te compone, Aleja los fantasmas de tu memoria. Sonrìe. El camino acaba y recién comienza...