Y aquellos ojos café que una vez ame con el alma, volvieron una tarde de Septiembre y con su color iluminaron nuevamente mi alma, despertando todo aquello que creí muerto en mi, pero que solamente dormía…

Y Cuando lo vi frente a mí, después de tantas tardes vacías con su ausencia, de mil noches enfrentadas a solas con mis recuerdos y mil amaneceres sin sus besos. Después de haber pegado el corazón que El mismo habia dejado roto en más de un millón de pedazos... Después de todas las lágrimas que por fin se secaban… regreso.

Y sus ojos café no eran los mismos de antes, no brillaban como solían hacer cuando me miraban, ni hablaban al verse con los míos.

No pude encontrar en ellos aquel amor que un día fue mío, busque y busque, intente encontrarlo, pero solamente encontré un vació. Ya habían cambiado, no eran los ojos café enamorados mios.

Y entonces otra vez se fueron de mi lado, dejando de nuevo mi corazón partido, y el color de sus ojos en mis recuerdos quedaron, solo que esta vez esos ojos cafe ya no eran mios.