Palabras que son sustento de oidos necesitados.
Palabras prometedoras a infantes de ojos esperanzados.
Verbos impresos de misterio, de promesas de otras vidas.
Rios de voces ardientes ahora, despues hirientes...
Palabras, Palabras...
Fonemas que como pólvora arden en lenguas contaminadas, sílabas enlazadas que pueden herir las almas.
Vocablos de odio y guerra, de desamparo e inaceptable rabia.

Y tú?

Palabra?

Palabra que anhelo tanto?

Donde duerme tu fragancia?

Esa esencia grata y pura que vestida de desvelo vuela ahora hacia mi magia, explotando en mi garganta en infinitos aspectos de mi existencia sagrada.

Palabra de madre nueva que mece amor en la cuna, vocablo de amores dulces, de lunas nuevas y blancas, voz de mi mediterráneo que vió mi adolescencia sangrada.

No me faltes tú, Palabra, que en mi cuaderno retoñas para formar esas frases que el sentimiento dispara.