(...hay que empezar por una punta... yo sólo tengo la del principio.) Salir de un silencio bílico a un lugar etéreo tangible. Salir de mi casa, a tu casa. Hallar una nota (...) Varias. Armarlas como de nuevo por vez primera. Mirar. Oír. Matar los esfuerzos. Reatrapar el alma. (sigue...)
Texto agregado el 14-09-2005, y leído por 141 visitantes. (3 votos)