- Vamos, vamos - reclama Talestris ante tan sorprendente ceremonia por parte de la sacerdotisa ante Afrodita - que no sabemos a ciencia cierta si esta bella joven es hija de Zeus. ¿Cómo puede ser hija de un dios e ignorar tantas cosas?


- Por cierto os digo reina Talestris, que esta joven es realmente una legítima deidad y una de las más importantes del trono divino.


- Vaya - contesta Afrodita en un suspiro de descanso - al menos una de vosotras es sabia al reconocerme. Habladme de las cosas de mi padre sabia amazona, decidme desde la creación del universo hasta las virtudes que los dioses os han otorgado.

- Desde la creación del universo hasta nuestros días han transcurrido muchos siglos Afrodita, sabrás todo lo que existe ha sido creado por Urano que es el padre de vuestro padre. El creó el cielo con sus soles, lunas y estrellas y todo lugar habitado por los mortales. En la aurora de los siglos, creó esta tierra y puso en ella todo lo que existe terrenalmente, mas creó al hombre y a la mujer como su principal habitante y dispuso para su alimentación el fruto de la ambrosía y el néctar de la vida eterna. Y así hombre y mujer fueron inmortales sobre una tierra plena de belleza y quietud. Mas con el paso del tiempo, hombre y mujer olvidaron a su creador abandonando sus rituales de alabanza y adoración desatando, por cierto, la ira de Urano. Fue entonces que nuestro ofendido padre dejó marchitar los frutos de la ambrosía y secar las fuentes del néctar, y el hombre y la mujer no volvieron a comer los frutos de la vida eterna y perecieron sobre la tierra, es decir, volvieronse mortales. Mas tarde, los propios hijos de Urano, entre ellos Cronos padre de vuestro padre, Zeus, rebelaronse contra él, venciendo en aquella rebelión al dios creador del mundo. Fue entonces Cronos gobernador del universo por mucho tiempo, mas una profecía le hizo saber que sus propios hijos le arrebatarían el trono y le confinarían al abismo de la creación. Lleno de temor ante tan terrible futuro, Cronos devoró a sus cinco primeros hijos, el sexto que es Zeus, fue puesto a salvo por Rea, la madre del ahora dios regente. Finalmente la profecía se cumplió y Zeus despojó del poder divino a Cronos. De esta manera, su hijo Zeus ocupó el trono divino transformándose en el regente de dioses y mortales. Mas éste es un buen dios y quiso restaurar sobre la tierra de los mortales la ambrosía y el néctar para devolverles la inmortalidad, pero no le fue posible cambiar la ley de Urano, la que había condenado al hombre a morar solamente determinado tiempo sobre esta tierra.


Como consuelo, Zeus entregó a los mortales algo parecido a la ambrosía y entonces les otorgó el néctar del fruto de la vid, que es el que habéis probado de manos de Talestris, joven diosa Afrodita. Por aquella razón, los hombres sabios de Atenas rezan: Si queréis vivir largos días, bebed del néctar del fruto de la vid.
Y escuchándola embelesada, Afrodita desea saber más sobre la cosas de su reino: