Si, es cierto. En tus razones solo existen momentos,
Puedo mirar encima de ti y descubrir tus ganas de unir situaciones.
Puedo ver en tu esencia la simpleza de una imagen callada, frágil, única.
Tu objetivo principal es convertirme en hedonista de tu ser.
Eres un alma taciturna que impregna todo mi universo con sus indescriptibles encantos.
Es fácil para ti convertirnos en uno cuando te poseo, cuando vuelvo a sentir el mismo placer de tenerte en mi interior y abrazo tu espíritu sarcástico.
Y una vez te vas, eres consciente del daño que has causado en mi y ríes.
Te gusta hacerme sufrir con tu ausencia, sientes placer al verme desesperado por poseer una caricia mas de tu oscuro, húmedo y caliente cuerpo.
Desapareces del universo del ojo, y te fundes en la nada de mi corazón roto, de mi espíritu satisfecho.
Corazón roto por la partida de un alma imbatible, un soldado armado de recuerdos únicos en nuestras vidas efímeras.
Espíritu satisfecho por la certeza de que hoy mismo nos volveremos a ver las almas.