“tengo un trato, lo mío pa mi saco, lo tuyo mas barato, mi lengua pa mi gato........-cantaba Julia al ritmo de la Mala contoneando sus caderas y fingiendo desnudarse ante un publico sediento de curvas....se miraba en el espejo, esa noche se veía bella, hermosa ,notaba un brillo en sus ojos tal vez despertado por las cervezas compartidas con Raquel.........sintió que al son de sus movimientos ella misma se derretía frente al espejo, quería que alguien más que su imaginación pudiese gozar de sus formas como ella las estaba disfrutando, se levantaba el camisón ciñéndoselo al cuerpo y estimulando cada centímetro de su piel, alargando ese momento hasta que pudieron adivinarse sus pechos..................
-me lo estoy cuurrando...yo marco el minuto ,y disfruto..........-en un arrebato de mezcla erótico musical se desprendió de la prenda, lanzándola contra los aires y quedándose en unas braguitas, que aun en su sencillez, esa noche Julia conseguía verlas como las mas sensuales que jamás se había puesto. Seguía meneándose al ritmo del hip hop, sosteniendo sus pechos y moviéndolos al compás de la canción, una y otra vez.
-eeeeeeee, como lo sabía yo, teeeeengo lo que tu quieres......-Julia se excitaba mirando su propio cuerpo, bajándose el tanga poco a poco y dejando al descubierto su depilado sexo, ya no necesitaba imaginarse a nadie observándola, era capaz de apreciar su libido ella sola, acariciaba su piel en un baile de mariposa golosa de placer, placer de sí misma, el espejo le devolvía una realidad q no sabía si era producto de su imaginación pero que le servía para sentir su estomago danzando con ella........dejó resbalar sus manos hasta su sexo infinito, sintiéndolo al ritmo de la melodía, escarvando en el mientras se miraba al espejo y cantaba la canción sin necesidad de utilizar la imaginación, probaba el sabor de sus hombros, ya con los ojos entrecerrados, salió de su zona mas erógena para deslizar sus manos sobre sus senos de pezones erectos hacia un infinito musical, dejándolos caer y volviendo a recogerlos salvajemente...se recostó sobre las sábanas, apretó su trasero y bailó como bailan las gatas en celo en las noches de luna llena, retorciéndose lujuriosa de placer y enmarañándose el pelo montada sobre su almohada, descendió hasta palpar su vagina, la parte más húmeda de su cuerpo, investigó entre los pliegues llevándose la mano a la cara para poder olerse y saborearse como si se tratase de la esencia de su propio corazón, en un gemido de placer se sumergió en lo más profundo de su túnel allí entre sus muslos, con un armónico baile subía y bajaba su cuerpo casi rozándose las mejillas con las rodillas, con sus dedos inmersos en aquel abismo de placer.........estallando por fin una gran fiesta sorpresa previamente avisada en la que no se pueden censurar los gritos, donde cualquier gesto vale pues solo se está viendo ella misma o tal vez ni eso, esa explosión la una vez mas la llevo a las puertas de la muerte, de una muerte q es vida, y que momentáneamente te permite quedarte ausente de todo l oque te rodea, hasta que el temblor de sus piernas y su piel de gallina la despiertan de ese nirvana para volver a la soledad de su cama.
Al igual q cuando se despertaba, Julia ya no bailaba al ritmo de la música.