Atraer a las arañas hacia una trampa mortal solo es posible esparciendo un poco de miel sobre la sombra.
El corpus dominus del insecto sustituye la inocencia de su piel en el fango de los nidos.
Pesadumbre de sus pasos, sopor de sus dotes.
La sempiterna forma del alzheimer de Dios clama el anuncio de un mañana holgazàn.
Arañas que jadean
nubes deformes
y yo que te prendo fuego en la alcalina oscuridad.
Texto agregado el 06-09-2005, y leído por 207
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Lectores Opinan
10-11-2005
Nunca una arana sera capaz de ensuciar el templo de nuestro descanso. Me gusto. lamore