Se filtraron a medianoche,
La misia estaba enojada
Salieron sin permiso de la casa y
no volvieron hasta la madrugada
El ño las esperaba detrás de la puerta
con una correa de cuero hambrienta por sus traseros.
Las rimas para no causar alboroto
entraron a la casa con los pies descalzos
fueron sorprendidas y de puntillas las zarandearon
Ja…Tremenda paliza que le dieron a estas chiquillas
Por querer pasarse de listas
Las castigaron y sin salir de casa dos meses estuvieron.
¡Carajo! ¡tremendo castigo!..
El escritor tiene la culpa…
Tápenle de una vez la boca y atenle las manos…
Texto agregado el 05-09-2005, y leído por 347
visitantes. (5 votos)