En reparación
La fragancia de los recuerdos, el tibio sol de un otoño...
las hojas lloran bajo las sombras de los árboles, elevan sus plegarias al cielo, como emociones destellan su tristeza, los ocres pintan nostalgia... los paisajes se silencian... un viento sacude mil motivos... errantes circunstancias, fuimos navegantes bajo una tormenta, prisioneros del destino, ella, ella se ha marchado, si las horas del tiempo pudieran anclarse y quedarse quietas...si pudiera rescatar el tiempo perdido, rescatar a la deriva sus besos y sonrisas, entonces todo sería distinto... sus labios silenciarían los míos y una sonrisa inundaría mi boca... un hechizo un cruel castigo, ,maldigo al destino, es cruel y traicionero, la felicidad se torna esquiva, nuestra historia se desvanece, mi alma se marchita... se duerme en los confines sin cantos ni esperanza... Oh Gran Illía dame fuerzas, no me dejes, no quiero ser el eco de un ocaso... navegar en las tinieblas sin pronunciar su nombre, sin acariciar sus labios, porque quiero sentirla a mi lado, atrapar una última mirada, respirar un último beso...
las golondrinas... las golondrinas
han buscado otro cielo...
Una mañana, una mañana más allá de este horizonte
el sol se atreverá a pintar tu nombre...
florecerán sobre los valles los girasoles...
un tibio beso pronunciará tu nombre...
pero hoy que todo se desvanece,
hoy que siento el frio de tu mirada
hoy que siento escarcha dentro de mi alma
bajo un cielo oscuro y traicionero
sin lunas, sin cometas
siento tu vacío tan cerca y a ti tan lejos...
como un estampido de estrellas...
porque tu sin desearlo y sin pensarlo
sobre ocres pinceladas te marchaste junto a ellas... |