Su voz ronca como Lauren Bacall
fruto de sus coqueteos,
de su aroma a tabaco
Tanto fumar por olvidar
echando sus grises nubes de suspiros,
como Bette Davis conociendo a Eva.
Y su empapado sexo,
afrutado de empeño
cubierto con el viejo néctar
de la vida,
a lo Linda Lovelace.
Sonando en el tocadiscos,
los viejos discos de rock
Girando sin rumbo el negro vinilo,
preguntándose y negándose
si quiere alguien para amar,
como Grace Slick.
Texto agregado el 31-08-2005, y leído por 134
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