Sólo quería que sea carnaval
aunque sea por un instante.
Ella sólo quería ver a la gente bailar,
ella sólo deseaba que se rían
y que canten...
Soñaba con disfraces
por lo menos una noche.
Soñaba con que cambien
tal vez con sus ropas.
Y en su cama fría
tapada con la almohada
esudándose del frío
escondiéndose de gritos,
ella hacía una cruz en cada día,
iba tachando el dolor.
Quizás nadie lo sabia,
tal vez ellos no entendían,
tal vez ellos suponían
con su lógica de adultos
que eran puras fantasías,
de una nena, tonterías...
Pero ella no se rendía,
porque desde su interior
había algo que le decía
que el carnaval pronto llegaría...
Texto agregado el 29-08-2005, y leído por 2606
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