Denise, como la inmovilidad de un pedazo de tierra en
la ilusión de alguien que vaga entre olas y soledad,
se me reveló una mañana de agosto, un par de años
atrás en la puerta del cabaret X. No soy culto ni
aspiro a serlo, mi tiempo transcurre en metáforas
sobre el humo de un cigarro y el deseo de ver a cristo
en una papa frita, pero a partir de Denise me
preocuparon más las cosas que se apartan, que miran al
mundo como si fuera realmente un pañuelo y lo
describen de una forma que ahora creo simple e
increible, como los horóscopos del canal siete cuando
aciertan.
Qué puedo decir que no se haya dicho ya sobre mujeres
excelentes. En Tucumán, en las desiertas calles de
Tucumán recuerdo haberme perdido en la amanecida
perspectiva de las anchas veredas, esperando verla
crecer desde un punto a lo lejos, incluso habiéndola
escuchado la noche anterior a miles de kilometros.
Todo en ella es como un sueño. Amar es producir una
mitología privada y hacer del universo una alusión a
la unica persona indudable, dijo Borges. Yo siempre le
creí.
No imagino el día en que deje de quererla, esta tan
lejano como el próximo minuto, imposible adelantarse
en pensamientos, las sensaciones son propias de aquel
minuto. Imaginarlo todo es comprenderlo todo, y
comprenderlo todo es perdonarlo todo, confundió Blake
un poco a Denise cuando leyó un delirante escrito mío
de hace unos días; pero me perdonó.
The girl I love she got long black wavy hair le digo
siempre que se me ocurre, y me mira como si hablara en
otro idioma, no lo entiende, y ni yo lo entiendo
porque más bien su pelo es lacio.
My love is in the kitchen la sorprendo mientras
cocina, y se acerca para bajar mis brazos de poeta
alcoholizado y dejarme un beso con el que empiezo un
monólogo sobre el amor y los fideos tirabuzón.
La existencia dudo sea clara después de ella, la
felicidad se corrompe. Mañana quizás me mate, solo
para quedarme en la eternidad de un buen momento.
|