Hoy te quise ver,
en la calle esperandote,
para verte al menos pasar,
de mientras recordandote.
Qué fuimos tan eternos,
un amor muy sincero,
que se nos olvidó
de mantenerlo.
Sentimientos que borraste,
cuando tu decisión tomaste,
olvido que no olvido,
olvido que odio,
¡Quiero odiarte y a la vez besarte!
Y sigo en la calle de la amargura,
sabiendo que por tu parte no hay duda,
esperandome, sé que no estás
y yo no lo puedo remediar.
Te sigo queriendo, tan sincero
mi amor sigue eterno,
no hay duda, mi lamento
se me clava como agujas.
Y tu recuerdo sigue permanente,
como si tú siguieras en mi,
historia que terminaste con labios de carmín,
labios que no beso en este presente.
Hoy te quise ver,
pero no lo pude hacer,
a mi celda vuelvo,
sabiendo que lo nuestro ha muerto.
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