*~ Estigma ~*

Sabes perfectamente que no te podría dar mi corazón así como así, lo sabías incluso antes de sentir todo esto. Sabías que yo cargaba con algo casi inconfesable que no me iba a permitir confiar ciegamente en la gente como una vez lo hice. Pero no te importó, porque tu determinación de seguir adelante contra todo miedo fue más fuerte. Pero eso fue sólo para ti. Como siempre, mi miedo fue más fuerte y me consumió de nuevo, alejándome de otra oportunidad de seguir adelante y dejándome paralizada en un pasado el cual sigue atormentándome a pesar de ser lejano y el cual he luchado por todos los medios de superarlo sin poder conseguirlo aún ahora, después de años... después de tantos años...

¿Y después de tanto tiempo te sigue preocupando eso? Supongo que te das cuenta que eso te hace daño y que deberías superarlo ya. No eres la niña que pasó por todo lo que pasaste, sea lo sea eso, has crecido y puedo decirte que te has fortalecido. Es hora de que dejes atrás lo que una vez te hirió y aprendas a superarlo. Sé que no lo olvidarás, porque esas cosas nunca se olvidan, pero rescata lo que aprendiste y desecha lo que te duele. Sabes que estoy dispuesto a ayudarte en todo lo que esté en mis manos, aunque nunca sepa qué fue lo que pasó.

Aunque supieras un día todo lo que pasó, tendrías que haberlo vivido desde mi punto de vista para saber lo que realmente significó para mí todo eso. Te confieso que es algo que no se lo deseo ni al peor de mis enemigos, el sentirse como me sentí. Sé que lo he arrastrado demasiado tiempo y que he faltado a todas mis promesas y estoy muy consciente del daño que me estoy haciendo a mí misma: por miedos chicos y casi estúpidos estoy haciendo realidad mi más grande pesadilla. A lo que más le tengo miedo es a la soledad y por mi propio miedo a ser herida y herir de nuevo, me estoy quedando cada vez más sola. He apartado a todo el mundo de mí, encerrándome en una carcaza ya casi impenetrable que ni yo puedo derrumbar porque se me acabó la fuerza al construirla.

No, aún tienes toda esa fuerza en ti, ¿O no necesitas fuerza para esconder todo lo que sientes? No cualquier persona es capaz de eso. Y en tu caso, eso va más allá del simple orgullo de no sentirte humillada, es por tu terminante deseo de que no te hieran más, que no usen tus debilidades en tu contra, que no sepan nunca cuál es tu punto débil. Esconderte de las personas que podrían hacerte daño. Pero al parecer se te fue de las manos, y terminaste por esconder todo de todos, incluso de aquellos que no buscan más que ayudarte. Entiendo cuando me dices que dejaste de sentir y que tus sentimientos se entumecieron, pero no están muertos. Y sólo tú puedes hacer algo por despertarlos de nuevo, si te atreves a querer, a arriesgarte otra vez. No sabes cómo va a terminar si no lo haces.

No, no lo sé. Y sé que no debería pasarme la vida preguntándome qué habría pasado, pero el miedo es más grande que mi determinación de superarme. Ya te lo dije, no quiero volver a sentirme como me sentí. Y créeme que yo soy la que está pagando el precio más alto, porque sé que he herido a otras personas que nada tuvieron que ver con el asunto, y no valgo tanto para herir al resto así. Por eso es que no sólo cargo con mis dolores, sino con el de los que he herido también. Así que nunca creas que soy una insensible, por más que pueda parecerlo o fingirlo.

Sí, lo sé. Pero no sé por qué repites lo poco que vales. Vales mucho como persona y eso he podido verlo en el tiempo que te conozco. Estás muy lejos de ser una persona común y corriente, y no porque seas un fenómeno, como crees tú que eres, sino porque eres especial. Eres tan sólo tú, con todo lo bueno y lo malo que tienes y deberías aprender a aceptarte como persona. No cualquiera saldría como tú saliste de tanta cosa que te hizo tanto daño. Debió haber alguna razón que te ayudó a levantarte después de todo.

Sí, y esa razón no me ha ayudado a superarlo, y he arrastrado todo esto por lo que parece una eternidad. Esa es la clase de persona especial que soy: alguien que nunca ha podido hacer las cosas por sí misma... no niego que algo aprendí de todo eso, pero siempre fue con dolor y ya no quiero que me duela más.

Si sigues cerrándote a las posibilidades, ¿Cómo esperas aprender de nuevo a querer? ¿Vas a vivir siempre con miedo o aprenderás de tus errores y seguirás adelante? Insiste en que no puedes dejar que esto te consuma. Al menos date una oportunidad a ti misma de querer de nuevo, y aunque no sea el indicado, piensa que habrás avanzado camino y cuando el indicado llegue, no te asustará un futuro incierto y podrás quererlo con toda tu alma. Volver a entregarte, pero esta vez sin que te hagan daño ni tú hacerle daño a los demás.

Me pregunto si habrá alguien dispuesto a enseñarme todo eso, aún a costa de mi ir y venir en un intento de querer a alguien sin entregarme por completo. Que sepa aceptar la consecuencia de alguien que estará muchas veces muy lejano, pero que nunca le fallará. Me pregunto si hay alguien dispuesto a aceptar esas consecuencias de querer a alguien que le parecerá lejano.

Tú sabes que hay alguien dispuesto a eso...

¿A aceptarme con todos mis estigmas?

A eso y mucho más.

¿Estás seguro?

Sí.