Para todos mis alumnos
Ya regresan a clases
los niños mexicanos,
y tarde se les hace,
todo está preparado.
Mochilas de colores,
lápices y libretas,
sus vestidos mejores,
la gente está contenta.
Su torta han preparado,
para la hora de recreo,
y como estoy angustiado,
a mi hija no la veo.
Desfilan los infantes,
parecen hormiguitas,
vienen tan elegantes,
con caras limpiecitas.
Todos llegan saludando,
con una gran sonrisa,
y me quedo mirando
y no observo a mi hija.
Ahí vienen unas niñas,
con un traje rosita,
caminan muy tranquilas,
ninguna de ellas grita.
Es hora de empezar,
la clase a comenzado,
mi hija en su butaca está,
y yo no la había mirado.
|