Surcando mares,
dejando que el viento acaricie su tersa piel
del tono de la nieve,
observo atónito tu mirada
clavada en mis marrones ojos
allá desde las nubes.

Seguiré esperando, apenas son un par de días
los que me distancian de tí, días...
días son unas gotas en mi océano de espera...

La luna refleja sentimientos
que su pura plata hace relucir
como reluce la mas bella rosa en tu corazón.

Me acunan las estrellas
que se afanan por darme vestigios de tus recuerdos
que albergan en mi pecho.
Sé que aun no estás aqui, pero yo te esperaré como la noche espera al día...