Caminaba en el alba,
y ahí ocurrió, se mató.
–lo siento.
–no fui yo.
No me di cuenta.
gota a gota la
espera esperaba
esperando esperada.
Buenos pensamientos.
Caminaba en el alba.
Lo lamento tanto.
¿y habría hecho?
– ¿qué harías tú?
-¿tu harías su ausencia?
Esperando el polvo,
camina en el alba.
Me estremezco,
veo la sangre,
veo la espera
tan esperada,
rota, sangrante
esperaba, el deseo
otra alba oscura,
húmeda, llorando,
sin llegar, sin llegar.
Nadando en sus
sueños de sangre,
de misterio, y ojos
mirando y o viendo nada.
Ya ahí se encontró,
después del alba,
en la noche,
una flor arrancada
de cuajo de su cuerpo,
de su vida,
que más importaba.
-¿tú harías su ausencia?
-¿y que harías tú?
¿y
tú? |