Entre el ruido incesante de las sillas
Y aquellos pasitos de primor entro la fortuna
De un acontecimiento mágico que hacia siglos esperé.

Mis ojos impávidos, detenidos bajo el influjo que tus palabras
Viaje sin remedio a buscarte entre mis restos
Logre rescatar un anhelado sentimiento que yacía moribundo.

Tome de la mano mis temores y salté sobre tus frases
Furtivos los pensamientos nacen en mi cósmica mente
Al pensarte cercano estrechándome entre tus brazos fuertes.

Y casi en un segundo arrebatador me diluí en tu lecho
Sentí explotar mis deseos logré alcanzar la dicha de tocarte
volando entre prados rosas idealizando un matiz terrenal.