Siento estallidos en mis espaldas, siento estallidos. Soy muy joven para pensar en lo que es el amor, pero en realidad que es lo que será esa palabra me pregunto, mientras dejo a mi esposa e hijos en un momento de locura. ¿Que es el amor? Me pregunto si sabiendo que el pueblo vecino fue vencido, ese pueblo que tenia mis esperanzas y mis amores. Me pregunto si dicha esperanza todavía me espera en casa con la cena, con el pavo en el horno, con el llanto de Andrea, con el humo de la tetera, me pregunto ¿qué es el amor?, Será acaso oh dios que no me compadeces de amar a alguien y sabiendo que en mi mano el rifle tengo, sabiendo que a tu voluntad de mandamientos, no mentiría y ni siquiera mataría, eso Cristo todo poderoso te lo pregunto, en mi aldea ya olvidada bajo las ruinas de un ejercito de muerte, que sin duda es igual al mío me pregunto, ¿ellos saben lo que es amar?, ¿Ellos sabrán lo que es amar?, ¿Ellos habrán estado enamorados alguna ves?, Mi pregunta es ¿si el amor existe?, Y como escuche en un tiempo muy lejano de mi vida antes de defender este país nato de muerte y desolación. ¿Que es lo que se ama cuando se ama?, Yo amada a Lisa, yo amaba a Robert, yo amaba a la gente, yo amaba a mi pequeña Andrea, yo amaba a mí sin fin de hombres no conocidos. Me cuestiono mucho esa pregunta, ellos talves aman el frío, el hielo, la tierra roja, ellos a lo mejor lloran por su general, o talves por su madre que una ves vida les dio y los convirtió en eso ¿quien sabe?, Me pregunto quien tiene esa respuesta, soy un novato en el frente de batalla. Frente que encuentro esquina cuando sé que mi amada me apoya del cielo, cielo que llueve en mi cara repudiándome y escupiéndome lo mal que he defendido mi amor, escucha ese silencio. No ese no idiota, lo que escuchas son balas, son muecas de muerte no ves que los gritos empedernidos de mi alma dicen ayuda para los desvalidos, pero que haré yo me digo tengo un revolver, y un maldito casco, ya no tengo nada mas, ni Andrés, ni Leo, ni Lisa, ni Roberto ya no tengo nada, solo tengo este tiempo vano y ultimo de desesperación, el enemigo se acerca yo tiemblo por el frío, conste no por ellos