Aun recuerdo aquella habitación,
llena de árboles por talar,
hablaban de verdades completas
que nadie pudo descifrar.
Aun recuerdo tu rostro colgado en la pared
convirtiendo lo sagrado en algo tan trivial,
voces de pago y alquiler,
luces rojas en la oscuridad.

Otra teoría que queda sin final
y tu nombre manchado en saliva,
y el miedo a la muerte una vez mas
solo es una mentira lasciva,
intentando ver cerca el final
entre muros de mentira.

NO, no recuerdo tu nombre al rezar,
quizás haya otra salida.
NO, recuerdo tu nombre al pensar
quizás sea otra mentira...
... otra mentira mas.



"No hay oración capaz de decidir por mi,
no queda otra opción y jamas me vuelvo a arrepentir"