...que la muerte pierda su asquerosa puntualidad
que cuando el corazón se salga del pecho
pueda encontrar el camino de regreso
que la muerte pierda su asquerosa
y brutal puntualidad...
M. Benedetti.
En la barra del bar se agitan taciturnos almanaques
liban a sorbos cortos su extracto
justificación de estar
sentir
cavilar
humedecer
Tragos breves
pausados con la exhalación
orgullosos tienden cuerpos a lo ancho de la arteria
su sangre rojo quemado
Color composta la médula
frío miedo hurgando nuestros tobillos
curiosos
Sería bueno saber el día
la hora
sería excelente saber el lapso cabal de nuestra defunción
las actas de baja podrían tramitarse con tiempo
y eso es conveniente si uno se mal vive sólo
¡Sí que sería pertinente!
pero mira que no es así
llegan más juiciosos con la sonrisa imbécil:
el asco y el tedio.
Texto agregado el 29-07-2005, y leído por 146
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Lectores Opinan
26-05-2006
Al menos sos coherente y conservas la linea de pensamiento. ¿Y después? Ya sé, acaso tu nada. Un saludo. JEF